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Cuando yo tenia casi once años, los médicos decidieron que era inevitable operarme de anginas y mis padres para compensarme de tan doloroso trauma, se ofrecieron a hacerme un regalo. Yo no tuve ni que pensar,-”Quiero un Quijote de la Mancha de leer”. Con ello quería indicar que no deseaba que fuera estilo tebeo con muchos dibujos y poco texto. Yo lo que necesitaba era algo que tuviera mas texto que dibujos. Para mi ya había dado por concluida mi iniciación a la lectura con los tebeos del “Capitán Trueno”, “Hazañas Bélicas” y por supuesto daba por concluido mis lecturas de las novelas ejemplares e corte histórico “Bárbara de Braganza”, “El Cid Campeador” y otras muchas que mi memoria ha dejado en el olvido. Desde entonces he fatigado muchos libros: novelas, filosofía, poesía, ensayo, historia, ciencia etc.; se podría decir sin temor a equivocarme que he tocado todos los palos.

El Quijote, que tuve la suerte que me regalaran y que aún conservo venia ilustrado por Vela Zanetti y tiene 837 paginas con sus correspondientes notas a pie de pagina. Desde entonces hasta ahora me lo habré leído como unas cuatro o cinco veces completo sin respirar.

Pero este blog, no va a tratar de mis lecturas pasadas, sino muy al contrario de las presentes, de las más actuales. Se trata mas que de recomendar de una invitación a la reflexión. Por lo general y salvo alguna excepción inevitable, lo que ahora busco por las librerías y las bibliotecas publicas son libros breves pero que sean muy jugosos, que den mucho que pensar… También te podrás encontrar con recortes de prensa, con artículos que me llamaron la atención… Y esto en definitiva es de lo que va a tratar este blog… Me gustaría contar con tu opinión y tu aportación si lo consideras oportuno


viernes, 18 de febrero de 2011

Henri Cartier-Bresson




Henri Cartier-Bresson- Este es un librito, muy breve de leer 99 pag y en realidad son un conjunto de notas llenas de buen sabor. Lo encontré por casualidad , cuando fatigaba las estanterías de la biblioteca municipal de la Vaguada, las verdad que no tienen mucho material que aborde el tema de la fotografía, pero cada vez que me paso, no dejo de echar un ojo por si han decido adquirir alguna obra nueva...

Hiroshima por Jhon Kersey


Hiroshima._El 6 de agosto de 1945 a las 08.15 una bomba atómica mató a cien mil personas en Hiroshima.
Se inició así una era en la que las armas de destrucción masiva forzaban un nuevo orden mundial y se descubrían formas inéditas de sufrimiento humano.
Un año después Hersey, entonces corresponsal de guerra para la revista Time, narró al mundo, en un estilo ajeno a todo sensacionalismo, la historia de seis supervivientes antes, inmediatamente después y en los meses siguientes a la catástrofe. Cuarenta años más tarde, el autor regresó a Japón para averiguar qué había sido de cada uno de ellos y añadió un conmovedor capítulo final.
Parece ser que este es uno de los libros recomendados a los estudiantes de periodismo, pero que luego más tarde cuando se colocan en algún medio les sirve de bien poco...
Disponéis de una edición de bolsillo: año de edición:2009 páginas:192-7,95~€

Don Quijote de la Mancha por don Miguel de Cervantes




"Sigo pensando que es una lectura muy recomendada. No es necesario leérselo de un tirón...
Bueno es la portada de mi primer Quijote, las ilustraciones son de Vela Zanetti...

miércoles, 16 de febrero de 2011

Homenaje a Cataluña por George Orwell


"La carretera avanzaba entre campos yermos y amarillos, intactos desde la cosecha del año anterior. Ante nosotros se levantaba la sierra baja situada entre Allcubierre y Zaragoza. Ya nos acercábamos al frente, a las granadas, las ametralladoras y el barro. Secretamente, sentía miedo. Sabía que la línea estaba tranquila en ese momento, pero, a diferencia de la mayoría de los hombres que me rodeaban, tenía edad suficiente como para recordar la Gran Guerra, aunque no bastante como para haber luchado en ella. Para mí la guerra significaba estruendo de proyectiles y fragmentos de acero saltando por los aires; pero, por encima de todo, significaba lodo, piojos, hambre y frío. Es curioso, pero temía el frío mucho más que al enemigo. Este temor me había perseguido durante toda mi estancia en Barcelona; incluso había permanecido despierto durante las noches imaginando el frío de las trincheras, las guardias en las madrugadas grises, las largas horas de centinela con un fusil helado, el barro que se deslizaba dentro de mis botas. Asimismo, admito que experimentaba una suerte de horror al contemplar a los hombres junto a quienes marchaba. Resulta difícil concebir un grupo más desastroso de gente. Nos arrastrábamos por el camino con mucha menos cohesión que una manada de ovejas; antes de avanzar cuatro kilómetros, la retaguardia de la columna se había perdido de vista. La mitad de esos llamados "hombres" eran criaturas, realmente criaturas, de dieciséis años como máximo. Sin embargo, todos se sentían felices y excitados ante la perspectiva de llegar por fin al frente. A medida que nos acercábamos a la línea de fuego, los muchachos que rodeaban la bandera roja en la vanguardia comenzaron a dar gritos de "¡Visca POUM, ¡Fascistas maricones!" y otros por el estilo; gritos que tenían como fin dar una impresión agresiva y amenazadora pero que, al salir de esas gargantas infantiles, sonaban tan patéticos como el llanto de los gatitos. Parecía increíble que los defensores de la República fueran esa turba de chicos zarrapastrosos, armados con fusiles antiquísimos que no sabían..." pag.36
Homeje a Cataluña.
George Orwell. Hace un par de horas que he terminado su lectura, y la verdad es uno de esos libros que no te importaría que tuviera más paginas o una segunda parte. Hay muchos momentos que sus descripciones están cargadas de tanta ironía que tengo que confesar que mas de una vez me ha movido a la risa, a la carcajada. Es un libro de los que se lee de un tirón casi sin respirar. Si de alguna manera os interesas conocer un poco de esa periodo gris de la historia de España este es uno de los libros imprescindibles y antes que se me olvide
KSAWERY PRUSZYNSKI EN LA ESPAÑA ROJA es otro de los libros recomendados.
Si el partido Comunista de España, ahora escondido detrás de las siglas de IU. hubiera podido a buen seguro hubiera echo desaparecer en la hoguera el libro de Orwell y no hubieran estado en desacuerdo en darle fuego los amigos del PSOE y su acolita UGT, No se si os acordáis de aquel slogan de los años 80 creo recordar que decía: "PSOE 100 Años de honradez". Pero parece que los españoles o una buena parte, preferimos vivir en la ignorancia y así nos va y lo que quedara por ver...

martes, 15 de febrero de 2011

Una farsa con cuatro actores de Carlos Taibo

enlacedelRecortekaos
El acuerdo que los sindicatos mayoritarios y el Gobierno acaban de alcanzar estaba cantado. Sólo los más ciegos, o los más ilusos, conservaban la esperanza de que esos sindicatos, con su triste trayectoria de decenios, mantuviesen encendida la llama de la independencia y de la contestación. Asumamos de buen grado que al menos las cosas quedan claras, muy claras, a los ojos de quienes han preferido ignorar la realidad durante meses. Si ya habían tirado por la borda cualquier ilusión en lo que hace a la vocación progresista --qué palabra más gastada-- del Gobierno, ahora ya saben a qué atenerse en lo que se refiere a CCOO y UGT. No parece, en fin, que la fanfarria retórica que nos acosa, convenientemente endulzada desde los medios de incomunicación, esté llamada a engañar a nadie: los acuerdos ultimados responden puntillosamente a los intereses y a las prácticas empresariales que nos han conducido a un escenario de crisis sistémica. Sobran los motivos para adelantar, eso sí, que ante la obscena reaparición de los mismos mecanismos que nos han conducido a la crisis, vendrán nuevas reformas desreguladoras.

Me interesa prestar atención en estas líneas a cuatro instancias que han quedado mal paradas de resultas del acuerdo que hoy nos ocupa. La primera de ellas no es otra, claro, que los sindicatos mayoritarios, al parecer más interesados en mantener saneadas sus cuentas que en preservar una credibilidad que está bajo mínimos desde hace mucho. No hay que ir muy lejos para explicar por qué las cúpulas dirigentes de CCOO y UGT han acatado aquello que siempre han dicho que rechazarían. Si, por un lado, esos sindicatos son pilares fundamentales del sistema realmente existente --qué poco sabe al respecto, por cierto, la derecha ultramontana--, por el otro su dependencia financiera con respecto a las arcas públicas ha cancelado cualquier horizonte de contestación y combate . Hay quien se sentirá tentado de agregar, con encomiable ingenuidad, que los sindicatos han asumido, pese a todo, un ejercicio de responsabilidad, no en vano han acabado por acatar lo que no les gustaba para evitar males mayores como los que se derivarían de un rescate exterior de la economía española. Qué curiosa manera de razonar es ésta. Por un lado se esquiva que quien profiere la amenaza --el Gobierno-- es responsable de una tolerancia sin límites con respecto a intereses privados que tienen en estas horas una clara plasmación: un formidable retroceso del gasto social orientado a hacer frente a las secuelas de una especulación desbocada durante años. Por el otro se nos da a entender, fraudulentamente, que el acuerdo ultimado no implica, a su manera, lo mismo que lo que acarreará un programa de rescate de la economía española, por añadidura en modo alguno descartable. ¿Cuánto dinero se aprestan a recibir, bajo mesa, CCOO y UGT por los servicios prestados?

Son muchos los amigos que me reprochan que siga prestando atención a lo que sucede en IU cuando --dicen-- lo mejor sería pasar página. Casi tantos como los que, en IU, consideran que tengo una inquina patológica contra su organización. Si a estas alturas todavía me interesa lo que sucede en la coalición de izquierdas, ello es así por una razón sencilla y confesable: creo que en ella hay muchas personas muy valiosas que merecen otra cosa. A esas personas debo señalarles lo que en esta hora resulta evidente: IU ha quedado con el culo al aire. Somos muchos los que avisamos de que CCOO y UGT eran malos compañeros de viaje. Hoy el argumento sale manifiestamente fortalecido, y no pueden producir sino estupor los intentos de la dirección de IU en el sentido de exculpar de lo ocurrido a esos dos sindicatos. En un escenario en el que los cambios, aparentemente radicales, registrados en la coalición en los últimos años anunciaban algo nuevo, no cabe sino certificar la quiebra técnica de un proyecto patético: el encaminado a moderar el discurso propio con la vista puesta en atraer, desde perspectivas estrictamente socialdemócratas y vía una escueta defensa de nuestro maltrecho Estado del bienestar, a segmentos importantes del electorado socialista con el respaldo más o menos obvio de CCOO y UGT (en la jerga de Izquierda Unida siguen presentándose, inopinadamente, como “los sindicatos de clase“). Hace unas semanas escuché cómo una dirigente de IU señalaba que el acceso de Fernández Toxo a la dirección de CCOO era un proceso paralelo al representado por la irrupción de Lara en la de Izquierda Unida. La frase tiene hoy un significado bien distinto de aquel que invocaba quien la enunciaba… ¿Para cuándo la rebelión de una militancia de base que con certeza ha visto con estupor cómo IU no convocaba las manifestaciones de los últimos días contra el pensionazo, por entender que acarreaban críticas a CCOO y UGT, y en estas horas se ve en la obligación de dar marcha atrás para de mirar de reojo a quienes contemplábamos atónitos la futilidad del empeño de una dirección que en los hechos, y si la razón más elemental se impone, se ha autoinmolado?

Tampoco está en sus mejores horas la pléyade de “economistas antineoliberales” --qué curioso lenguaje éste, tan sagaz como encubridor-- que han defendido proyectos diferentes de los avalados por nuestros gobernantes. No se trata de discutir la honradez ni el talento de estas gentes. Se trata de preguntarse, eso sí, si no harían bien en volcar una y otro en provecho de causas más justas. Incapaces de transcender los conceptos míticos que nacen de su disciplina --y entre ellos, en lugar singular, el crecimiento y la productividad--, su respetabilísima defensa de los Estados del bienestar no parece tomar nota en grado alguno de una crisis ecológica que despunta por todas partes y que --me temo-- sitúa en el vacío buena parte de sus reflexiones. No es eso, sin embargo, lo que hoy hace que estos amigos se encuentren en situación delicada, sino su general respaldo de los últimos meses --alguna excepción hay, por fortuna-- a las cúpulas de CCOO y UGT, comúnmente acompañada de sesudas descalificaciones de quienes, qué menos, invitaban a la cautela. Compuestos y sin novia.

Vaya mi último comentario para dejar constancia de un interés personal: el de observar cómo algún que otro medio progresista va a lidiar con los escollos que ha colocado delante de sí mismo. Estoy pensando, en singular, en el diario Público, que de siempre ha ignorado que existían otras fuerzas sindicales, y otros discursos, al margen de CCOO y de UGT (“los sindicatos”, en la jerga utilizada por ese periódico). Ahora que las críticas vertidas por esos medios contra algunos elementos de los planes económicos del Gobierno, siempre muy ponderadas, ya no cuentan con el civilizado aval de los sindicatos mayoritarios, ¿se abre en esos circuitos algún horizonte que no sea la loa unánime de la bondad de nuestros gobernantes?
http://www.carlostaibo.com/articulos/texto/index.php?id=317